Escribe: César Zelada | Opinión
- 19 dic 2009
El escándalo de corrupción suscitado por los pasajes pagados a Finlandia, por la Universidad Privada Alas Peruanas (UAP), a congresistas apristas, plantea de modo dramático la cuestión del rol de la Universidad privada en la sociedad peruana. Más aun cuando varias personalidades políticas como el alcalde de Lima, Luis Castañeda, cursan estudios de Arquitectura en esta casa de estudios.
El fujimorismo privatizó la educación bajo la política neoliberal. Supuestamente, la educación en manos del mercado, generararìa más competencia, y por ende, más calidad académica, investigación y desarrollo. En este sentido, en nuestra Patria, existen más universidades privadas que nacionales. E incluso se redujo el presupuesto para las nacionales. Y es que el neoliberalismo plantea la reducción del Estado y que éste tenga un carácter meramente observador. Han pasado casi veinte años. ¿Cuál es el resultado? Un sistema universitario que no figura entre las 500 mejores de Shangai y con signos de corrupción como es el caso patético de Alas Peruanas.
Aunque los apristas argumentan que no hay ninguna prueba de corrupción, pero es obvio que si la UAP, ha corrido con los gastos de viajes de congresistas oficialistas (y sus esposas), y de Francisco Távara, vocal de la Corte Suprema, pues, como dice el dicho “favor con favor, se paga”. Y esta claro que la UAP no pudo haber conseguido 80 mil alumnos y más de 20 filiales en todo el país, sino hubiera sido por el apoyo del APRA.
A esto hay que sumar que Fidel Ramírez, rector de la UAP, y que a viajado con los apristas al último Congreso de la Internacional Socialista en Grecia, está cuestionado por tener un titulo bamba de la Universidad de Barrington, en EE.UU (leer : http://www.periodismoenlinea.org/200912145706/Noticias/Titulos-del-rector-de-la-UAP-Fidel-Ramirez-en-el-ojo-de-la-tormenta.html). Y la misma universidad no está acreditada para dar títulos a nombre de la nación.
Esta situación a generado preocupación en los estudiantes de la UAP que pagan mensualmente su pensión con la esperanza de que, a través de su esfuerzo e inteligencia, después de algunos años, puedan tener un titulo que les pueda dar mejores oportunidades de trabajo.
No obstante, la situación de inestabilidad y falta de calidad moral y académica por la que pasa la UAP, produce incertidumbre en el estudiantado. Y el gobierno, en vez de dar solución, al estar involucrado, complica todo al querer boicotear la Comisión de Educación del Congreso. El Partido Nacionalista, ha planteado una comisión de investigación. Pero esto es insuficiente.
La UAP ha demostrado que ésta solo tiene como objetivo lucrar con la educación. Es la mercantilización de la educación. No existe ni investigación, ni aporte académico ni nada. No hay un Plan de cuantos profesionales de derecho, médicos o ingenieros, necesita nuestra patria. Se producen profesionales en función del mercado.
Los estudiantes de la UAP necesitan una solución. Y esta pasa por la nacionalización de la UAP bajo control ciudadano, para que el Estado asuma su responsabilidad política sobre la educación y la formación de los líderes que se encargaran de dirigir nuestra Patria frente a los acontecimientos científicos y políticos que nos depara la historia como la contaminación ambiental, justicia comunitaria, las explosiones sociales, la cuestión nacional, la crisis de la democracia y tendencias autoritarias que siguen votando por el fujimorismo.
Necesitamos una universidad donde los estudiantes ejerzan el pensamiento crítico anticapitalista y tengan una práctica humanista, con el objetivo de convertir el infierno en que vivimos en un paraíso.
http://www.losandes.com.pe/Opinion/20091219/31125.html
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