La vía fue cortada por dos huaicos. Capa de 10 cm de nieve dificultó
el paso en Ticlio
La fuerza de la naturaleza se ensañó
contra los habitantes de varios distritos de la provincia limeña de
Huarochirí. Fuertes vientos afectaron las viviendas de unas 200 familias
de los distritos de San Bartolomé, San Jerónimo de Surco y Cocachacra,
ubicados entre los kilómetros 50 y 65 de la Carretera Central.
La zona más afectada fue San Bartolomé, incluidos los anexos de
Tornamesa, La Merced de Chaupe y Arapampa, donde viven unas 2.160
personas. “Los vientos comenzaron cerca de la medianoche, pero no le di
importancia. Luego se puso más intenso y levantaron algunas calaminas de
mi casa, dijo Esther Pomacja Bautista, de 34 años, quien en medio de la
oscuridad, debido al corte del fluido eléctrico, dejó su vivienda con
sus dos hijos de 4 y 12 años, para ir a la casa de su madre construida
de ladrillo”. Ella cuenta que el inusual fenómeno duró hasta las tres de
la madrugada.
Luego de una evaluación inicial de los daños, el alcalde de San
Bartolomé, Hernán Baldomero Mendoza, dijo que en el centro del distrito
se contaron 81 viviendas afectadas, mientras que en el anexo de
Tornamesa hubo 39.
La fuerza de los vientos hizo que las calaminas se desprendieran de
los techos, además arrancó de raíz varios árboles, algunos de hasta 80
metros de altura. Uno de ellos cayó sobre la iglesia María Auxiliadora y
destruyó parte del techo. En total se contaron unos 60 árboles caídos,
la mayoría de ellos en zonas de sembrío. También se cayeron cuatro
postes de transmisión eléctrica y uno de fibra óptica. Técnicos de Luz
del Sur y Telefónica llegaron a la zona para reparar los daños. En ambos
casos informaron que el servicio se restablecería en las próximas
horas.
En los distritos de San Jerónimo de Surco y Cocachacra hubo 45 y 30
familias afectadas, respectivamente.
César Requejo, del Indeci, dijo que los daños más graves fueron en
San Bartolomé, donde se necesitan 3.000 calaminas para las familias
afectadas.
Según Nelson Quispe, meteorólogo del Senamhi, los fuertes vientos en
Huarochirí se originaron por la variación de temperatura entre zonas
altas y medias del país, fenómeno conocido como gradiente térmico. “Las
variaciones de temperatura hacen que el viento se intensifique y se
canalice por algunas cuencas”, precisó.
El Senamhi calculó que las ráfagas de viento alcanzaron una
velocidad máxima de 60 kilómetros por hora. “Por la tarde han disminuido
a una velocidad normal, entre 15 y 18 kilómetros por hora. No se
descarta que mañana pueda suceder el mismo fenómeno, pero no con la
misma intensidad”, aseguró Quispe.
HUAICO EN EL KILÓMETRO 53
En tanto, un huaico se produjo a la altura del kilómetro 53 de la Carretera Central, a tres kilómetros de San Bartolomé. El deslizamiento de piedras y lodo, que afectó la línea del tren y bloqueó parte de la carretera, ocurrió a las 2.30 p.m. Una hora después llegó la maquinaria pesada del Ministerio de Transportes y despejó la vía.
EL DATO
Hubo otro en 1982
Élmer Mendoza, secretario técnico de Seguridad Ciudadana de la Municipalidad de San Bartolomé, asegura que un fenómeno similar ocurrió en 1982. Los pobladores no estaban preparados.
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