La
"reaparición" del Papa después de Nochebuena ha estado rodeada de
grandes medidas de seguridad.
El Papa Benedicto XVI almorzó
con 150 pobres e indigentes en un comedor de beneficencia de Roma. Era
la primera vez que el Pontífice abandonaba el Vaticano desde que fue
atacado durante la Misa del Gallo en la Basílica de San Pedro.
También las medidas de seguridad adoptadas por la policía italiana fueron excepcionales.
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Según informó el reportero de la BBC David Willey, antes de entrar al comedor, el Pontífice se detuvo –bajo la atenta mirada de los agentes de seguridad italianos y vaticanos- para saludar a la multitud que se había congregado a las puertas de la organización benéfica.
A continuación, Benedicto XVI ha compartido mesa con una mujer afgana y una familia rumana. En un breve discurso, el Papa ha asegurado que nadie debería ser marginado o abandonado a su suerte.
Antes de regresar al Vaticano, el Santo Padre ha repartido dulces y regalos entre los niños presentes.
"Problemas psíquicos"
No quería hacer daño al Santo Padre
Susanna Maiolo, mujer
que empujó a Benedicto XVI
"No quería hacer daño al Santo Padre", aseguró la joven a los médicos del hospital en declaraciones citadas por la agencia de noticias EFE.
El personal que atendió a Maiolo indicó que la mujer sufre "problemas psíquicos" y tiene un "pensamiento inestable".
A lo largo de los próximos días, un juez del Vaticano decidirá si se enfrentará a cargos penales y si está en condiciones de ser juzgada.
En Nochebuena de 2008, la joven también intentó acercarse al Papa, pero en aquella ocasión los guardias de seguridad impidieron el ataque.
Estos acontecimientos han levantado dudas sobre las medidas de seguridad que protegen al Papa.
http://www.bbc.co.uk/mundo/cultura_sociedad/2009/12/091227_1649_papa_reaparicion_pea.shtml
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