Propuestas del XX Congreso Panamericano del Niño, Niña y Adolescente serán consideradas en políticas públicas

• Lima, set. 26 (ANDINA).- La ministra de la Mujer y Desarrollo Social, Nidia Vílchez, sostuvo que las propuestas de los menores en el XX Congreso Panamericano del Niño, Niña y Adolescente, realizado en nuestro país, serán tomadas en cuenta dentro de las políticas de niñez y adolescencia, además de abrir mayores espacios para escuchar su voz. “Hemos instalado el Consejo Consultivo del Niño, Niña y Adolescente, integrado por 12 delegados nivel nacional y serán con los que implementemos la acciones de seguimiento. De esta manera estamos dando un paso adelante al escuchar la voz y opinión de los niños al momento de elaborar las políticas públicas en niñez y adolescencia”, señaló la ministra al clausurar ayer este evento.
  Así se da cumplimiento a las recomendaciones del foro, quienes propusieron conformar Consejos Consultivos a nivel local, regional e interamericano para que las palabras, opiniones, necesidades y propuestas de niños, niñas incluyendo a aquellos con habilidades diferentes o en situación de discapacidad.
  “Consideramos que las recomendaciones en mayor participación en la toma de decisiones en la disminución de todo tipo de violencia. Todos han coincidido con el discurso dado por el Presidente de la República de rechazar la violencia, reducir la compra de material bélico e invertir más en la niñez y la adolescencia”, comentó Vílchez Yucra.
  En ese sentido, una de las conclusiones del congreso elaboradas por delegaciones de niños, niñas y adolescentes de 33 países participantes, hace un llamado a todas las autoridades para que dejen atrás los conflictos fronterizos, dando prioridad a la educación de los menores, generando así una cultura de paz mundial. “Más escuelas, menos armas”.
  Otras conclusiones son priorizar a la infancia y adolescencia en el presupuesto público de los Estados, prohibiendo toda forma de castigo físico y psicológico en las familias, las instituciones escolares y en la sociedad.
  “Los adultos deben olvidar la idea de que los niños, niñas y adolescentes tenemos dificultades para expresarnos, no somos capaces de crear cosas productivas, y no manejamos los conocimientos suficientes para participar. Por lo tanto, sólo nos imponen en vez de promover o estimular nuestra participación”, señalaron en el Congreso.
  En ese sentido, plantearon promover la participación de personas con capacidades y necesidades especiales, así como implementar espacios públicos aptos para que participen todos los niños, niñas y adolescentes, favoreciendo la recreación, la cultura, el juego, la expresión y la comunicación.
  Asimismo, educar y sensibilizar a personas vinculadas a la niñez y adolescencia sobre los derechos de los niños, niñas y adolescentes; y la promoción de la participación.
  “El Estado debe brindar asistencia familiar y desarrollar campañas con metodologías correctas para promover en los padres una actitud más abierta, escuchando a los niños, niñas y adolescentes, permitiéndoles dar opinión sobre los temas que los afectan a ellos y sus familias”, coincidieron los menores.
  Crear o mejorar los espacios de estimulación temprana que fomenten la participación en niños y niñas de cero a cinco años, incluir los derechos de las niñas, niños y adolescentes como una materia a nivel escolar, que se dicten a través de metodologías vivenciales, son otras conclusiones del congreso.
  Mejorar y garantizar las condiciones de empleo para adultos a efectos de mejorar la calidad de vida de sus familias; aumentar el número de profesionales y centros de atención de salud que promuevan la atención de niños, niñas y adolescentes en situación de riesgo o exclusión (niños, niñas y adolescentes que viven con VIH/SIDA, madres adolescentes y adolescentes drogodependientes); e implementar programas de orientación en educación sexual.
  Aumentar la inversión en educación por parte de los Estados; garantizar transporte en zonas lejanas para que los niños, niñas y adolescentes con bajos recursos económicos, asistan a las escuelas.
  Crear Consejos Estudiantiles con la participación de niños, niñas, adolescentes, padres y miembros de la comunidad en general.
  “No privar a las madres adolescentes de su derecho a la educación. No queremos una educación memorista, sino que parte de nuestras experiencias. Ampliar y mejorar los programas de alimentación y relacionarlos a las escuelas urbanas, suburbanas y rurales”, son también otras conclusiones del congreso panamericano.
  Dichas conclusiones fueron expuestas por dos voceros del denominado “congresillo panamericano”, integrado por los delegados infantiles y juveniles de los países participantes.
  Para terminar, la pequeña de 10 años, Yomira Yerovi Masías, representante de Ecuador, dio un mensaje de unión para los países hermanos panamericanos, rescatando los valores de la amistad y confraternidad.
  Participaron además la directora general del Instituto Interamericano del Niño, Niña y Adolescentes (INN), María de los Dolores Aguilar Marmolejo; el presidente del Consejo Directivo del INN, Mario Víquez; el secretario de asuntos jurídicos de la OEA, Jean Michel Arrighi, entre otras autoridades y expertos internacionales en temas de niñez y adolescencia.
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