Sucedió en laguna de la provincia de Requena.
Delincuentes querían impedir que los bufeos se alimenten de la pesca de
la que aquello se beneficiaban
La laguna de
Bagazán, en la localidad de Sapuena de la provincia de Requena,
departamento de Loreto, fue el hábitat y la tumba para al menos cinco
delfines rosados. Los animales, cuya especie está en peligro de
extinción y se encuentra protegida por ley, habrían sido envenenados por
pescadores furtivos, para evitar que los delfines se alimenten de la
pesca silvestre de la que se benefician aquellos.
Carlos Perea Sichar, representante Produce consultado por Frecuencia
Latina, recalcó que atentar contra su bienestar constituye un delito
ecológico estipulado en el Código Penal.
Representantes de la Dirección de la Producción y de la Ecología
amazónica ya presentaron una denuncia ante la Fiscalía de la Nación.
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